Depresión... vieja amiga.
Al fin has vuelto a visitarme.
Ya no tengo miedo.
Ya no tengo sueños.
Ya no tengo nada... sólo me quedas tú.
Me acoges en tu oscuridad más profunda.
¡Mataste mi amor!
¡Mataste mi ilusión!
¡Mataste mi armonía!
¿Por qué ahora no terminas conmigo?
¡MÁTAME A MI!
Estoy bailando contigo en el filo entre la vida y la muerte.
Pero si muero... Tú morirás conmigo.
Soy el cuerpo que encierra esta desdicha...
Y tú eres la culpable de este llanto.
hola! ,me ha impactado ,escribes muy bien ,triste pero perfecto ,un gusto leerte ,te espero por mi blog :) te sigo
ResponderEliminar